Con la poesía en las manos, sin saber que hacer. Muevo los dedos aburridos. Los abro abruptamente. La dejo caer entre mis piernas. Juega un poco despistada . Abro las piernas. Cae al suelo. Confusa y desmayada, se golpea la cabeza. Vuelve en sí "Poe? sí, ahhh!"dice. Y vuelve a trepar inocente entre mis dedos.